La Real Sociedad cerró el domingo el primer tercio de temporada. Lo hizo con una merecida victoria en Almería. Llegó tarde, pero por una vez que ganamos en el descuento no vamos a poner pegas. El equipo venía de completar una exhibición histórica en la Liga de Campeones. Dos días y medio después fue capaz de cambiar los registros y ganar en Almería un partido que hace no tanto nunca hubiera ganado. Lo consiguió, además, con una actuación destacada de la segunda línea, encabezada por un gran Sadiq y Beñat Turrientes. Porque esta vez la primera parte fue mejor que la segunda, a pesar de que los goles llegaron tras el descanso.
Pero a lo que iba. Un tercio de temporada y unos números espectaculares, conseguidos a través de un fútbol que fascina ahora también en Europa. En Champions, un empate y tres victorias, que deberían ser cuatro, gracias a lo cual la Real ya se ha colado entre los dieciséis mejores equipos de Europa, Invictos, primeros de grupo y con solo dos goles en contra. Y todo esto viniendo desde el bombo 4 del sorteo. Una hazaña realista. Un sobresaliente muy merecido.
En la Liga la Real ha sumado 22 puntos en 13 jornadas. Está a solo cuatro de esa media de dos por partido que te deja muy arriba. Y, de verdad que, si el fútbol fuera justo, deberían ser por lo menos 28. Las buenas noticias se acumulan además en la familia realista por el buen momento de hombres como Barrene -a nivel estratosférico- Aihen, Zubeldia…; por la recuperación progresiva de Sadiq; por la irrupción de Turrientes; por el nivelazo de nuestro capitán -yo nunca le quitaría si no pide el cambio-; por otro comienzo increíble de Brais; por el mando en cada partido del señor Merino, don Mikel; por el espectáculo que es Traoré; por la muralla que supone Le Normand; por las lecciones diarias de Zubimendi; por el momentazo de Remiro; por la verticalidad de Kubo… Y todos de la mano de nuestro patrón, el gran Imanol. Si hay suerte y los internacionales vuelven sanos de este parón, podemos vivir una recta final de año no igual, mejor.
Ahora mismo ser primeros de grupo en Champions y seguir en puestos europeos deben ser los dos objetivos hasta diciembre. Y, de verdad. Lo que hagan los demás me preocupa poco o nada. ¿El Girona? Enhorabuena por su comienzo, pero lo único que me importa es que nuestra querida Real, que nos está haciendo disfrutar como nunca, siga a lo suyo, con su trabajo, con sus formas y maneras y que mantenga la humildad en todos los partidos. A partir de ahí… A partir de ahí vamos a seguir disfrutando. Vamos a seguir ganando partidos. Y vamos a seguir arriba. Muy arriba.