
Dicen los más jóvenes que no recuerdan un robo igual a la Real. Yo como soy no tan joven, sí lo recuerdo. Y más escandaloso todavía. Y lo recuerdo muy bien. Fue en la temporada 79-80. La Real luchaba codo con codo con el Madrid por el título de Liga. Era la temporada de la imbatibilidad. Ya sabéis, 32 de 34 partidos que entonces duraba la Liga sin perder un partido. En plena lucha por el título la Real de Ormaetxea se plantó en el Bernabéu. Gran partido de los nuestros y 0-2 en el marcador en la segunda parte. La Liga volaba a Donosti para alborozo de todos los realistas. Entonces apareció el árbitro para ponerse la camiseta blanca, besar con su parcialidad el escudo del Madrid y robarle la Liga a la Real. Los blancos marcaron el 1-2 y cuando el partido moría un ataque del Madrid acabó con falta metro y medio fuera del área. García Carrión, que así se llamaba el ínclito, señaló penalti. Así, sin ruborizarse, sin vergüenza, sin ponerse colorado. Y el Madrid empató a dos. Esto fue el colofón a una injusticia sin igual. Lo que Valdano llamaba miedo escénico lo era, pero no de nuestros jugadores, sino de los colegiados, a los que el Madrid regalaba en cada partido un reloj de lujo. Casi al final del choque, ya con el 2-2, Satrústegui se escapó solo hacia la portería rival, pero Benito le agarró para frenarle y derribarle. Nada. Sigan. La Real acabó con diez, no le dejaron salir de su área. Fue un escándalo de proporciones inauditas, que le costó la Liga a los nuestros. Un atraco a mano armada. Los realistas dejaron la marca de su impotencia rompiendo a patadas las puertas de los vestuarios del Bernabéu… No tenían más camino que ese.
Semanas después acabó la Liga con el Madrid primero (sin rubor) y la Real segundo. La crónica del último partido de El Diario Vasco, escrita por el difunto Luis de Andía, se titulaba ‘Telón’. En ese artículo, el periodista se despedía de sus lectores y les decía que tras el robo perpetrado a la Real decía adiós al periodismo asqueado de tanta manipulación y corrupción y que no tenía sentido seguir escribiendo de fútbol después de lo que había pasado.
Hoy es un buen día para volver a titular un artículo ‘Telón’, segunda parte. Yo no puedo retirarme porque ya estoy retirado, pero después de lo visto en Mánchester siento lo mismo que entonces Luis de Andía. Asco. Hastío. Desgana. Hoy me da vergüenza decir que me gusta el fútbol. Lo del francés en Old Trafford acaba con la esencia de este deporte. No nos dejaron competir. No nos dejaron jugar. Tres penaltis en contra. Ninguno lo fue. Uno a favor. Y señaló falta de Oyarzabal. Una expulsión que no fue. Once faltas en contra saldadas con siete amarillas y una roja. Ya sé que la Real no se podía ir del campo, pero entiendo que tuviera ganas. No me extraña que la anterior directiva de la UEFA acabara en la cárcel. Cosas como las de ayer demuestran que nada ha cambiado. Ganan los que quieren que ganen. Y pierden los demás. Todo mi ánimo y apoyo a nuestro equipo. En la injusticia, solidaridad con los agraviados. Por eso, ahora más que nunca hay que estar con ellos. Aupa Real. Mil veces aupa Real!
Buenas Pedro
Solo podemos decir, ROBO ESCANDALOSO. Pensaba que en Europa eran más profesionales y que no se podían cometer ese tipo de injusticias por parte de los colegiados pero veo que me equivoco.
Arbitro inhabilitado por tres errores graves, no uno ni dos, tres y aun reconociendo los errores la UEFA, no hay nada que hacer. Solo nos queda centrarnos en la liga y la copa, que no es poco.
AÚPA REAL 🔵⚪️🔵⚪️🔵⚪️
Así es Iván. Lo triste es eso, que no puedes hacer nada. En la UEFA hay la misma corrupción o más que aquí. Ganó quien querían que ganara. Y lo del balón a Bruno firmado por sus compañeros con el mensaje de «cuánto le pagaste al árbitro» ya es la leche. A ver si reaccionamos en Vallecas. No va a ser fácil. Bai. Aupa Real!
Bueno, aquí sigo Pedro, digiriendo lo que vi anoche en Old Trafford. Cómo dices, fue algo esperpéntico, aunque como dijo Oyarzabal, y cuando habla lo dice todo muy claro, no hay que olvidar una ración de autocrítica. Empezó la segunda parte y aquel equipo que se había mostrado combativo en la primera desaparecía para dejar el balón en pies de los diablos que una y otra vez merodeaban en área de Remito, otra vez el mejor pese a encajar cuatro goles. Luego vinieron más esperpentos arbitrales y se cerró el telón como dices. Recuerdo muy bien aquel robo de Madrid porque ya para entonces viajaba con el equipo y la noche fue larga y dura. Mucho se habló de aquél penalti de Guruzeta, pero este no le quedó a la zaga. Nos robaron un triunfo que a la larga supuso una Liga. Espabilemos en esta Liga, que es nuestra salvación de la temporada como ya venimos repitiendo aunque no parece que nos escuchen. Ah! Y quién es responsable de que el visado de Zajarian no estuviera en regla? Saludos desde Manchester y tras una visita a Liverpool, se diga lo que se diga, templos futbolísticos como nuestro añorado Atotxa.
Hola Tito. Yo está vez no tengo nada que oponer a nuestro equipo. Más bien lo contrario. Salió bien, se adelantó a pesar del árbitro y luego no le dejaron competir. Y si no te dejen no hay nada que hacer. Estoy seguro de que si la Real mete tres este francés de marras pita seis penaltis a las nuestros. Y echa a tres. Efectivamente a por la liga. Es lo que he defendido siempre. Y lo de Zaka no tiene nombre. Dónde estás Juantxo Trecet? Ánimo
Que ‘bonitos’ recuerdos los de aquellos atracos a la Real… Y leer los ladrillos, con todo el cariño del mundo, de nuestro compañero Luis de Andia. Cabreos de adolescente que ahora han revivido los jóvenes, como el del pasado jueves en Mancheter. Decisiones que parecían ser fruto de un buen cheque o que buscaban mostrar a la UEFA, a sus jefes, que era un dócil árbitro dispuesto a todo por la causa de que el espectáculo siga con los equipos de caché y así, algunos sigan ganando euros televisivos como ya se ha demostrado en otras épocas y que parece nadie ha limpiado el montaje-chanchullo.
Telón por culpa de una mala persona. Me quedo con las protestas, con la presión, con las declaraciones de los jugadores que, esta vez, no fueron monjitas de la caridad. Nuestro gran capitán es el único que realiza esa labor que otros equipos hacen de forma coral y que echo en falta durante muchos encuentros. En fin, vamos a mejorar en la Liga. ¿La Copa? ese es otro telón. Blanco y en… el Bernabéu. No hay más preguntas.
Así es. Son muchos los recuerdos de entonces y los cabreos que nos llevábamos con aquellas injusticias, como la de Hamburgo. El jueves viendo a la Real me volvieron muchos de ellos y de verdad que cuando pasan estas cosas me pregunto si todo este circo del fútbol merece la pena. Pero al final siempre puede el sentimiento txuri urdin. Y eso. A ver si nos recuperamos y volvemos a nuestro nivel en la Liga. Lo de la Copa yo también lo doy por acabado. Gracias.