11/04/2025
Gurekin

Hoy no escribo yo. Lo hace mi orgullo realista en mi nombre. Hay capítulos en la historia de nuestro equipo de grandes alegrías y enormes decepciones. Entre las primeras, las que yo he podido vivir, el título de Gijón, el segundo en Atocha contra el Athletic, la Supercopa contra el Madrid, la Copa de Zaragoza, el ascenso de 2010 y la Copa de La Cartuja. Este último es nuestro título eterno, por siempre y para siempre. Entre las decepciones, la Liga que voló en Sevilla, la Copa que se perdió en Madrid contra en Barcelona, la Liga que se escapó en Vigo, el descenso en Valencia y la semifinal del año pasado frente al Mallorca.

No. No incluyo en esta segunda lista la eliminación de ayer. Y no la incluiré nunca. Me niego a considerar que lo hecho por los nuestros en el Bernabéu sea una decepción. Es lo contrario. Sabéis que era de los que no confiaba. Lo reconozco y pido perdón al equipo por ello. Lo veía casi imposible, pero la realidad es que estuvo muy cerca. Tanto, que nadie puede discutir que en los 210 minutos de eliminatoria la Real fue mucho mejor que el Madrid. Por eso hoy la familia realzale no puede estar triste, sino sentirse orgullosa y feliz. Ayer nuestro escudo voló por todo lo alto del mundo futbolístico. Voló como aquellos días de alegrías en los que llevamos trofeos a nuestra vitrina. Ayer no hubo premio, el premio que se mereció. Pero la felicidad no la dan solo los títulos. Ya sabéis aquello de que la verdadera felicidad se encuentra en la pasión, en el esfuerzo, en el proceso y no en el resultado.

Sé que hubo errores. El fútbol es un deporte de acierto-error. Sé que se encajaron cuatro goles, que lo teníamos en la mano en el minuto 81. Pero hoy no toca hablar de eso. Toca destacar el partidazo realizado, siempre de cara, la fuerza mental y física desplegada por los nuestros, la ambición, la rasmia y los cuatro goles marcados al Madrid en su campo. Por cierto es la segunda vez en cinco años que lo hacemos. ¿Cuántos más pueden decir lo mismo?

Entre todas las imágenes vividas en esta larga noche, me quedo con esa piña txuri uridin de antes de empezar la prórroga. Hablaba el gran capitán, don Mikel Oyarzabal, escuchaba el resto de la plantilla y allí, sobre el césped del Bernabéu, en medio de esa piña estábamos todos los realzales animando y agarrándonos el escudo con fuerza con nuestra mano izquierda par dar las gracias a todos y cada uno de los jugadores, por habernos hecho disfrutar de otra noche histórica, pasara lo que pasara después. Yo me fui a la cama orgulloso. Orgulloso por vuestra lucha, orgulloso porque muchas veces una derrota -un empate ayer- no es sino un paso hacia la victoria. Y ayer la Real dio un paso de gigante hacia su futuro, un futuro que empezó a asomar de la forma más ilusionante. Este es el camino. Cabezas arriba. Lágrimas fuera. Beti gurekin! Beti zurekin! Hoy más que nunca y más fuerte que nunca, aupa Real!

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10 comentarios en «Cuando la derrota es un paso hacia la victoria»

  1. Buenas Pedro

    Lo mismo dije ayer. Orgulloso de ver como nos enfrentamos al Madrid en su campo.

    Aúpa real 🔵⚪️🔵⚪️🔵⚪️

    1. Así es. Les tuvimos ahí. Y faltó muy poquito. La lástima fue que desde que Oyarzabal marca el 1-3 hasta que recibimos el 2-3 no volvimos a tocar el balón. Ahí estuvo la clave

  2. Totalmente de acuerdo. Solo podemos sentir orgullo por este equipo. Se dejaron la piel por este escudo y nos hicieron soñar. Goazen Reala beti!!!!

  3. Hay partidos que me dejan una rabia contenida y el del martes lo fue porque la valentía de la Real por buscar la final no tuvo premio cuando lo mereció. Toca analizar las secuelas, seguro que buenas en lo anímico por la satisfacción del deber cumplido pese al resultado final y habrá que ver en lo físico porque si ya veníamos justos de gasolina, el gasto en el Bernabéu fue importante. De todas formas, por qué me he quedado con la sensación de que estaba viendo un partido que desde el principio sabía cómo iba a terminar por mucho que pareciera que lo teníamos en la mano? En el Bernabéu siempre pasan cosas así…

    1. Efectivamente dio rabia lo del martes porque lo tuvimos en la mano. Y como siempre en ese campo pasan cosas ‘raras’ por decirlo de alguna forma. No he querido hablar del arbitraje por no desviar la atención, pero influyó mucho y no a favor como la prensa mediática nos quiere hacer ver.

  4. Muy buenas Pedro.

    Me fui a la cama muy orgulloso y sin pena, porque hicimos todo lo que estuvo en nuestra mano.

    Lo que más me jode hoy es la fuerza que tiene la caverna mediática madridista, encima van de víctimas, que si penalti, que si expulsión.

    Y lo nuestro no existe o sigan, sigan, en fin.

    Pero nosotros a lo nuestro, que por eso somos de la Real y disfrutamos con ella.

    1. Eso es Iñaki. No hay que hacerles caso. La entrada de Camavinga a Kubo fue peor que la de Olasa, que le da a Vinicius en el muslo. Y el fuera de juego de Mbapé… en fin. Fue una pena porque nos quedamos sin energía para la prórroga pero fue un partidazo… Ahora, a la Liga. Gracias y ánimo. Y no hagas caso a las chorradas que dicen por ahí

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